La NASA aseguró que el terremoto sufrido por nuestro país vecino, Chile, habría modificado el eje de la Tierra en 8 centímetros. Esto sería, según muchos, parte de las profecías que hablan de un importante y profundo cambio del mundo actual.
El terremoto de 8.8 grados que sacudió a Chile podría tener consecuencias para todo el planeta, dado que movió el eje de la Tierra de tal forma que ahora los días son más cortos a causa de ello.
El experto de la agencia aeroespacial norteamericana, Richard Gross, usó un complejo modelo matemático cuyos resultados preliminares indican que el sismo "debería haber acortado la duración de un día terrestre en unos 1.26 microsegundos", señaló en la página Web de la NASA.
Según expertos, cualquier evento mundial que implique el movimiento de masa afecta a la rotación de la Tierra, porque un fuerte terremoto mueve cantidades masivas de rocas, lo que altera la distribución de la masa del planeta, pero en este caso el impacto fue mayor porque el movimiento fue cerca del polo sur.
Esta observación científica sustenta algunos de los temores sobre las profecías Mayas: ¿Qué impacto tendría?
Las profecías señalan que a partir del 2006 comenzaría una época de oscuridad que obligaría al cambio del ser humano: grandes cataclismos que harían pensar a la raza humana en la manera en que está viviendo, haciéndola mejorar.
En ese sentido, el sismo vendría a sumarse a una serie de cataclismos de alto impacto que se han dado en el mundo en los últimos años: Sumatra, China, Haití, Chile.
Este tipo de remezones no sólo implican una devastación de los lugares y la pérdida de vidas humanas, sino además, un impacto social importante, en el que miles de personas profundizan sobre la manera en que se está viviendo, el daño al ecosistema, la pérdida del sentido en que los humanos aprovechamos la naturaleza.
Asimismo, el cambio de eje traería implicancias energéticas importantes para cada uno de nosotros, pues , siendo parte del cambio final que se daría el 22 de diciembre del 2012 y que cambiaría totalmente lo que conocemos.
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